El calendario encomienda todos los años al Descenso de Hondarribia otear el horizonte e invitar a sus participantes a compartir, de manera relajada, esa perspectiva amplia que se divisa desde la atalaya del mes de febrero. Ayer, un club atisbó, mejor que nadie, una luz esperanzadora en el más allá arraunlari y se bajó del mirador entre aliviado y eufórico.
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Orio se alejó ayer definitivamente del túnel con una victoria que, pese a la moderación en las declaraciones, le proyecta hacia la élite de la ACT por encima de su actual condición de asociado de la ARC. Alejó los fantasmas de 2011 con paladas y sensaciones que van más allá de este 2012. Confirmó de la manera más contundente su cambio de ciclo y tendencia, su nuevo proyecto, ideado para mirar más allá del corto plazo.
El primer objetivo del nuevo proyecto dirigido por Igor Makazaga consistía en romper con el pasado. «La plantilla necesitaba sacudirse el lastre negativo del año pasado porque en invierno todavía se ha notado algo del peso psicológico de 2011. Los chavales se merecían una alegría y recuperar ilusión y en ese sentido nos viene bien la victoria», comentaba el míster tras la regata.
Participaron en el triunfo que marca un antes y un después en el club aguilucho Aitor Carrillo (patrón), Andoni Peña, Mikel Portularrume Paorra, Asier Carballeda, Iñigo Mujika, Oier Aizpurua, Mikel Azkarate (babor), Josu Indo, Erik Aranburu, Xabier Bereziartua Txato, Arkaitz Goñi, Ion Mujika, Igor Makazga (estribor) y Miguel Ángel Millares (proel).
En la única ciaboga de la prueba -se retomaba el campo de regateo de la clasificatoria de La Concha hasta 1982, a dos largos- la Mirotza aventajaba en tres segundos a Hondarribia y en cuatro a San Pedro, segundo y tercero respectivamente también en meta. La tendencia se mantuvo y las desventajas de verdes y amarillos acabaron siendo de cinco y once segundos.
Ningún participante disfrutó remando. El viento y la superficie marina picada no dejaron a las tripulaciones elevar su ritmo de palada por encima de las 33-34 paladas en esta fase de la temporada.
Hondarribia, al igual que el ganador, mantuvo un ritmo crucero de 32 paladas por minuto, «tratando de profundizar en lo que entrenamos en el día a día», comentó Mikel Orbañanos, entrenador y remero de la Ama Guadalupekoa. Satisfecho con el resultado final, reconoció que «sabíamos que Orio venía reforzado y no me sorprende el rendimiento que han demostrado». El míster alineó una tripulación muy parecida a la que puede disputar en veranos las grandes citas de la temporada.
Completó el podio moral de la jornada San Pedro, cuyo rendimiento fue «incluso mejor de lo que esperaba» para su técnico, Gabi Larrinaga. El donostiarra explicó que «la tripulación se ha sentido bastante cómoda a pesar de que no habíamos hecho un trabajo específico para esta regata y los tiempos marcados me tranquilizan y me dicen que no vamos desencaminados».
Zierbena también salió reforzado de su primer enfrentamiento directo con sus nuevos rivales ACT. Los de Patxi Francés dejaron atrás a embarcaciones de la talla de Astillero y Pedreña y no se despegaron demasiado de los mejores tiempos. Menos de diez segundos separaron al tercero del sexto, un indicativo de la igualdad que, incluso en invierno, impera en la élite.
Algo más se le escapó el tiempo a Zumaia, que con una tripulación muy joven no acertó a amoldarse a unas condiciones difíciles. Su entrenador, Santi Zabaleta, reconoció acabar con «sensación agridulce sobre todo porque no hemos hecho el ejercicio que veníamos a hacer».
Similar valoración hacían en San Juan tras un discreto resultado. «No hemos tenido las sensaciones que experimentamos en la bahía en el día a día y el campo no estaba para remar cómodo», comentaba Joseba Fernández, técnico de los rosas. Confesó que la plantilla lleva la preparación algo retrasada y que mezcló a los teóricos titulares en las dos embarcaciones alineadas.
Zarautz marcó el mejor tiempo entre las traineras ARC después de Orio y causó una grata sensación demostrando que tiene maneras para bogar en alta mar. En la categoría femenina, San Juan marcó el mejor tiempo (16:12.52), dejando a 40 segundos a Hondarribia y a más de un minuto a Orio.
Orio, también en bateles
Orio también ganó la regata senior de la cuarta jornada de la Liga Guipuzcoana de bateles sacando ocho segundos a Trintxerpe
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