54 alumnos viajarán a los campamentos de refugiados saharauis a finales de marzo
Vivirán de primera mano la dura realidad de este pueblo en el viaje trianual que organiza Darahli
La asociación de apoyo al pueblo sahararui Darahli organiza cada tres años un viaje a los campamentos de refugiados de Tinduf que para los jóvenes que en él participan se convierte en iniciático.
Una expedición de 72 personas, que incluye a 54 alumnos de ESO de los centros escolares de Zumaia, a los que se une un nutrido grupo de voluntarios, muchos de ellos antiguos alumnos que tomaron parte en anteriores viajes, llevará ayuda a los campamentos a la vez que conocen la realidad en la que viven los refugiados expulsados del Sahara Occidental, antigua colonia española, hoy ocupada por Marruecos.
El viaje se llevará a cabo del 27 de marzo al 5 de abril. Darahli reunió esta semana a participantes en el viaje y padres en una sala Oxford de la casa de cultura Alondegia que se quedó pequeña para la ocasión. Tras informar a jóvenes y padres de las labores que llevarán a cabo en los campamentos, se celebró un acto en el que tomaron la palabra responsables de la asociación, el alcalde de Zumaia, Iñaki Agirrezabalaga, y los directores tanto del Instituto de Zumaia, Jone Amundarain, y de Maria eta Jose ikastetxea, Isaak Aranberri.
Samuel Ruiz, coordinador de Darahli, puso como ejemplo del apego del que cuentan la cantidad de personas reunidas en la sala y nombró a estos jóvenes «embajadores» del pueblo saharaui.
«El pueblo saharaui lo que quiere es que se de a conocer su situación». Destacó asimismo el apoyo por parte del Ayuntamiento del que cuenta desde un inicio. Fruto de ello es que dos de los alcaldes en las últimas legislaturas viajaron con Darahli a los campamentos.
El objetivo de estos viajes trianuales es hermanar a los pueblos de Zug y de Zumaia, así como el hermanamiento y reunión de los jóvenes sahararuis y zumaiarras.
Samuel Ruiz definió las distintas ayudas que se le ofrecen al pueblo refugiado: «La ayuda política, que es muy importante y para la que siempre nos ha gustado involucrar a las instituciones, para de esta manera poder solucionar un conflicto que se remonta 35 años atrás; la ayuda humanitaria, con la entrega de alimentos, medicamentos y placas solares; y la sensibilización de la sociedad, para el cual se han organizado diversos actos a lo largo del año».
Los alimentos y productos sanitarios recogidos en la última campaña, así como las 21 placas solares, se enviaron el pasado mes de febrero mediante la Caravana Vasca. Los jóvenes llevarán consigo el dinero y las respectivas cartas para las 30 familias seleccionadas para hermanarse con otras tantas familias vascas. Asimismo, se inaugurará un edificio que se encontraba en pésimas condiciones y cuyo arreglo ha sido financiado desde Zumaia.
El director titular de Maria eta Jose ikastetxea, Isaak Aranberri, resumió la postura de los centros escolares sobre esta iniciativa humanitaria «en la que todos estamos implicados. Estos alumnos son el futuro y para ello son necesarias las vivencias de los que serán testigos. Es muy importante conocer aquella realidad, ya que nos demuestran que pueden ser muy felices sin contar con mucho».
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