El valle del Urola tiene garantizado el suministro de agua hasta marzo de 2013
El embalse de Ibai Eder se encuentra al 85% de su capacidad
El Consorcio de Aguas prioriza la llegada de agua potabilizada al casco de Aia, que se acometerá en 2014
Esas declaraciones, realizadas ayer por el encargado de la planta depuradora de Ibai Eder, Mikel Egiguren, evidencian la inmejorable situación en la que se encuentra el embalse ubicado en el barrio azpeitiarra de Nuarbe que (en estos momentos, al 85% de su capacidad) abastece de agua potable a la mayoría de la población de Urola Erdia y Urola Kosta (Azkoitia, Azpeitia, Orio, Getaria, Zarautz, Aizarnazabal, Zestoa, Zumaia y parte de Aia).
Todo ello con la particularidad de que, en el caso de que fuera necesario, el embalse de Ibai Eder (con capacidad para almacenar 11,3 hectómetros cúbicos) también está preparado para suministrar agua potable a los vecinos de Urola Garaia (Legazpia, Urretxu y Zumarraga).
Eso sí, en una situación de normalidad como la actual esas localidades se nutren exclusivamente del embalse de Barrendiola (ubicado en Brinkola), que puede almacenar 1,5 hectómetros cúbicos de agua para consumo humano.
Visita guiada La situación de la red de abastecimiento de agua potable en el valle del Urola se dio a conocer durante la jornada de ayer en una expedición organizada por el Consorcio de Aguas de Gipuzkoa con el fin de mostrar a los técnicos y representantes políticos de Urola Erdia y Urola Kosta el funcionamiento de las diferentes instalaciones.
Ese encuentro, al que acudió NOTICIAS DE GIPUZKOA, arrancó con una visita para conocer las particularidades y el funcionamiento de la presa de Ibai Eder y continuó con una parada en la Estación de Tratamiento de Aguas Potables (ETAP) del mismo nombre, enclavada en las inmediaciones del barrio azpeitiarra de Oñatz.
Allí, el director de explotación del Consorcio de Aguas de Gipuzkoa, Josetxo Saizar, dio cuenta del funcionamiento de una infraestructura en la que se determina la cantidad de agua procedente del embalse de Ibai Eder que, tras el proceso de potabilización, se asigna a cada municipio.
En esa depuradora se lleva a cabo un proceso que dura "cuatro o cinco horas" y que incluye "en primer lugar, la oxidación del agua y a partir de ahí la mezcla con reactivos, la decantación, una ozonización intermedia, la filtración y desinfección del agua". Finalizado el procedimiento potabilizador, de la estación de tratamiento de Ibai Eder salen, con destino a los depósitos existentes en los diferentes municipios, "250 litros de agua por segundo", listos para su consumo.
Eso sí, en verano, "debido principalmente al incremento de la población y del consiguiente consumo en las localidades costeras de la comarca", esa cantidad puede llegar a ser de 300 litros por segundo, explica en un receso el responsable de Organización del Consorcio de Aguas de Gipuzkoa, Mikel Zubizarreta.
El propio Zubizarreta recordó que el agua que se almacena en el embalse de Ibai Eder y que posteriormente se envía para su tratamiento a la estación de Azpeitia (y de allí a los depósitos desde los que se distribuye a los domicilios) "procede de diversos arroyos existentes en torno al embalse pero, sobre todo, de sendas laderas montañosas de Beizama y Matxinbenta".
Curiosamente, los vecinos de esos dos núcleos urbanos son, junto a los residentes en Errezil, el casco de Aia y otros barrios como Oñatz, Odria o Nuarbe, parte de los pocos habitantes de la comarca que a día de hoy siguen sin poder consumir el agua potabilizada procedente de Ibai Eder.
Las personas residentes en esos enclaves "consumen agua de captaciones y con tratamientos propios"; si bien la Diputación Foral de Gipuzkoa "ya está analizando los manantiales de los que se nutren esos núcleos poblacionales para ver qué opciones hay para poder bombear también hasta allí el agua que previamente ha sido tratada en la estación de Azpeitia".
En este sentido, el presidente del Consorcio de Aguas de Gipuzkoa, Eneko Etxeberria, avanzó ayer que la entidad a la que representa "ha establecido como actuación prioritaria la preparación de las infraestructuras necesarias para bombear agua potabilizada hasta el casco de Aia" (la parte baja de ese municipio ya consume agua tratada previamente en la estación de Azpeitia).
La razón por la que el Consorcio ha establecido esa actuación entre sus inversiones prioritarias obedece a que "la calidad del agua de los manantiales de los que se nutre el casco de Aia no es tan buena como la del agua que se consume en los municipios enganchados a la red de abastecimiento
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