LA OLA DE CALOR
Cruz Roja cierra junio con 69 rescates y alerta de la peligrosidad de las playas
La ola de calor deja una nueva jornada asfixiante a casi 40 grados que acabó con la entrada de una violenta galerna
IRAITZ ASTARLOA - Sábado, 4 de Julio de 2015 - Actualizado a las 06:14h
DONOSTIA - El buen tiempo y las altas temperaturas han provocado que miles de guipuzcoanos hayan abarrotado durante las últimas semanas los arenales guipuzcoanos, una circunstancia que ha llevado a la Cruz Roja a pedir que se aumente la precaución, especialmente en el baño, y es que, tal y como alertan los socorristas, el movimiento de los fondos marinos que se ha producido durante el invierno hace que las playas estén “más peligrosas que nunca”, especialmente en la zona de Zarautz y Zumaia.
Según informó Cruz Roja ayer en un comunicado, sus socorristas llevaron a cabo el pasado mes de junio un total de 1.289 asistencias, la gran mayoría debido a cortes y heridas (585), traumatismos cerrados (179) y picaduras de sabirón (157). Aunque la gran mayoría de estas asistencias fueron de carácter leve, lo cierto es que los socorristas tuvieron que intervenir en 69 rescates, de los cuales 40 requirieron de una posterior evacuación a centro sanitario. El dato no es baladí, ya que, según aseguraron, se han realizado 55 rescates más que en el mes de junio del pasado año. Además, la mayoría de ellos se realizaron en la playa de Itzurun, en Zumaia, (38), y en Zarautz (16).
En estos dos enclaves, se han duplicado los rescates con respecto a 2014, lo que ha llevado a los responsables de la seguridad en las playas a pedir precaución. Y es que, tal y como ha alertado el Ayuntamiento de Zarautz a lo largo de esta semana, “el mar está más peligroso que en veranos anteriores. Parece ser que los movimientos en los fondos de arena han provocado que los agujeros sean mayores y que las corrientes y las olas aumenten las situaciones de riesgo”.
Por ello, desde Cruz Roja recordaron que las banderas y los avisos de los socorristas son “de obligado cumplimiento” y que su único objetivo es “garantizar la seguridad de todos los usuarios de la playa y evitar accidentes”.
EL BOCHORNO ACABA EN GALERNA Por otro lado, Gipuzkoa vivió ayer otra sofocante jornada con máximas que superaron los 35 grados en muchas zonas de la costa, donde el calor se hizo notar más que en el interior. Así, según Euskalmet, los valores más altos en el territorio se registraron en Behobia, donde los termómetros llegaron a marcar los 39 grados; en Donostia llegaron a los 35,7, mientras que en Arrasate se quedaron en 33,7.
El bochorno acabó con la entrada de una virulenta galerna (en la isla Santa Clara de Donostia llegaron a registrarse rachas de viento de hasta 90 kilómetros por hora) a última hora de la jornada que hizo caer los mercurios diez grados en unos pocos minutos.
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