Los Reyes recorrerán las calles de Zumaia montados en caballos
La comitiva partirá a las 18.00 desde la Ludoteka para finalizar en la plaza Gurrutxaga, donde está situado el portal de Belén
«Badatoz erregeak! Badatoz erregeak!», exclamó un ilusionado niño al ver aparecer a los pajes y portadores de antorchas que se dirigieron al lugar indicado para proceder a la recogida de cartas de los niños. Dado lo desapacible que se puso la tarde (el chaparrón que echó a las tres de la tarde presagiaba lo peor), el acto se desarrolló bajo la cubierta de Torreberri.
Desde minutos antes un gentío se aglomeró frente al edificio situado en la plaza Gurrutxaga. Alguna familia guardaba el sitio con varias horas de antelación. Los niños llevaban consigo los obsequios que quieren encontrarse la mañana del lunes: desde videojuegos de última hornada a la tradicional muñeca Barbie; desde la camiseta del equipo de fútbol favorito o del futbolista de moda a un libro.
Poco a poco, de tres en tres, los niños se presentaron ante los pajes de los Reyes. Mientras, los padres capturaban el momento con sus cámaras de fotos o de vídeo. Nerviosos, un tanto aturullados, los niños expresaron sus deseos. Seguro que no faltarán regalos en el zapato del pequeño.
A caballo
Como bien es sabido, tras varias decenas de años organizando los actos navideños, la sociedad Txepetxa renunció por diversos motivos a dirigirlas. En esta ocasión han sido distintos departamentos municipales quienes se han aprestado a organizar estos actos tan queridos por buena parte de la sociedad zumaiarra. Para ello han contado con el apoyo de algunas asociaciones y particulares.
Este cambio tendrá su reflejo en la misma cabalgata, que seguramente perderá buena parte de vistosidad para retomar su esencia. En esta ocasión los Reyes no arribarán a puerto en barco. Atrás han quedado también las coloridas carrozas donde se montaban los magos de oriente, toda vez que la cabalgata, nunca mejor dicho, se realizará a caballo.
La comitiva, en la que también desfilará una carroza que lleva regalos y que ha sido elaborada por miembros de Jakintza kultur taldea, partirá a las 18.00 desde las inmediaciones de la Ludoteka hacia Alai auzategia. A la altura del Instituto tomará el camino hacia Aita Mari para desembocar en Patxita Etxezarreta. Tras cruzar Zubitxikia, tomará la Txomin Agirre kaia para girar en Amaiako Plaza y encarar Erribera kalea. La cabalgata finalizará en la plaza Gurrutxaga, donde está instalado el Belén viviente.
Siempre que el tiempo acompañe, los caminos por donde transcurrirá la cabalgata estarán repletos de zumaiarras, niños que miran absortos a los Reyes y de padres que, viendo a sus hijos, retoman la ilusión e inocencia.
«Badatoz erregeak! Badatoz erregeak!», exclamó un ilusionado niño al ver aparecer a los pajes y portadores de antorchas que se dirigieron al lugar indicado para proceder a la recogida de cartas de los niños. Dado lo desapacible que se puso la tarde (el chaparrón que echó a las tres de la tarde presagiaba lo peor), el acto se desarrolló bajo la cubierta de Torreberri.
Desde minutos antes un gentío se aglomeró frente al edificio situado en la plaza Gurrutxaga. Alguna familia guardaba el sitio con varias horas de antelación. Los niños llevaban consigo los obsequios que quieren encontrarse la mañana del lunes: desde videojuegos de última hornada a la tradicional muñeca Barbie; desde la camiseta del equipo de fútbol favorito o del futbolista de moda a un libro.
Poco a poco, de tres en tres, los niños se presentaron ante los pajes de los Reyes. Mientras, los padres capturaban el momento con sus cámaras de fotos o de vídeo. Nerviosos, un tanto aturullados, los niños expresaron sus deseos. Seguro que no faltarán regalos en el zapato del pequeño.
A caballo
Como bien es sabido, tras varias decenas de años organizando los actos navideños, la sociedad Txepetxa renunció por diversos motivos a dirigirlas. En esta ocasión han sido distintos departamentos municipales quienes se han aprestado a organizar estos actos tan queridos por buena parte de la sociedad zumaiarra. Para ello han contado con el apoyo de algunas asociaciones y particulares.
Este cambio tendrá su reflejo en la misma cabalgata, que seguramente perderá buena parte de vistosidad para retomar su esencia. En esta ocasión los Reyes no arribarán a puerto en barco. Atrás han quedado también las coloridas carrozas donde se montaban los magos de oriente, toda vez que la cabalgata, nunca mejor dicho, se realizará a caballo.
La comitiva, en la que también desfilará una carroza que lleva regalos y que ha sido elaborada por miembros de Jakintza kultur taldea, partirá a las 18.00 desde las inmediaciones de la Ludoteka hacia Alai auzategia. A la altura del Instituto tomará el camino hacia Aita Mari para desembocar en Patxita Etxezarreta. Tras cruzar Zubitxikia, tomará la Txomin Agirre kaia para girar en Amaiako Plaza y encarar Erribera kalea. La cabalgata finalizará en la plaza Gurrutxaga, donde está instalado el Belén viviente.
Siempre que el tiempo acompañe, los caminos por donde transcurrirá la cabalgata estarán repletos de zumaiarras, niños que miran absortos a los Reyes y de padres que, viendo a sus hijos, retoman la ilusión e inocencia.
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